lunes, 1 de diciembre de 2008

Toma mi mano


Te dije una vez, "estoy segura de que si me pasase algo todo seguiría igual"...
Ahora me doy cuenta de que no debería haber dicho eso y me arrepiento.
Desde que te conozco has sido mucho más que una amiga para mí, has sido mi hermana, la mejor hermana que nadie jamás podrá tener. Siempre has estado ahí, apoyándome, animándome… y por eso te adoro.
A veces me costaba expresar mis sentimientos pero contigo nunca me ha costado el mínimo trabajo. Cuando te digo que te quiero, que te adoro, lo digo desde lo más profundo de mi corazón, como si fuesen las últimas palabras que pudiera decir en mi vida.
Quiero que sepas que nadie esta a salvo de que le pase nada, y si a mi me pasara lo último que querría es que estuvieses mal. Me gustaría que siguieses adelante, sin mirar atrás. No te pido que lo olvides, porque se que una cosa así no se olvida jamás, solo aprende a vivir con ella, aprende a vivir sin mi.
Y por eso te digo: “Estoy dispuesta a caminar por el sendero contigo, hermana”.

1 comentario:

Esteban dijo...

La amistad siempre es muy vonita.